Los trabajadores y trabajadoras del extinto CEMI hemos solicitado mantener las condiciones del convenio CEMI en el proceso de subrogación, mientras se realiza la negociación de las condiciones laborales y salariales, básicamente la Valoración de Puestos de Trabajo (VPT) y la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) definitivas. Esta medida siempre sería temporal, hasta que se llegue a un deseable acuerdo o bien hasta la aprobación de un nuevo convenio municipal negociado con los representantes sindicales.
Esto aparece reflejado en el acta de la Junta de Gobierno local a petición expresa de la Concejala de Innovación y que es Dictamen de Comisión de Pleno, aprobado posteriormente por el Pleno del Ayuntamiento y publicado en el BOPMA:
“Se iniciará una negociación respecto a la modificación de la RPT. En cuanto haya acuerdo y se decidiera por parte del personal del CEMI la aplicación del convenio colectivo del Ayuntamiento de Málaga, se iniciará el correspondiente expediente de modificación de RPT y plantilla para la equiparación de las categorías profesionales del citado convenio. Este expediente se iniciará con carácter inmediato, una vez se produzca la integración en los términos de los puntos anteriores”.
La dirección de recursos humanos del Ayuntamiento de Málaga parece ser que ha decidido pasar por encima de la decisión del personal del CEMI aprovechando que el convenio del Ayuntamiento, negociado y firmado con los sindicatos del Ayuntamiento en el año 2024, se va a publicar en 2025 debido al retraso en su tramitación por parte del propio Ayuntamiento de Málaga. La negociación de ese convenio no incluía a los trabajadores del CEMI, ni existía negociación con sus representantes sindicales, porque el CEMI no formaba parte del personal del Ayuntamiento.
Es peor que hablar de que sus acuerdos quedan en «papel mojado», puede decirse que los políticos pueden mentir el Boletín oficial con total impunidad.
Para nosotros supone algo más que una «treta» legal, que lógicamente vamos a impugnar en los juzgados. Supone la demostración de que se puede mentir en el BOPMA, de falta de voluntad negociadora real y del rodillo dictatorial que el área de personal, en representación del Alcalde, quiere aplicar a los empleados del antiguo CEMI.
(Nota imagen: Portada histórica del BOPMA de cuando Francisco de la Torre era presidente de la Diputación de Málaga)